HABAS
La siembra
Crudas o cocidas, salteadas con bacon o al wok junto a otros vegetales, antes de llegar a la mesa las habas deben ser sembradas en hileras de 60 cm. de distancia, con una separación de unos 20 cm. entre planta y planta.
Lo mejor es plantar las semillas a una profundidad de 5 cm. y lo ideal es hacerlo en primavera (en climas fríos) o bien durante el otoño si el clima es más templado. Incluso puedes animarte a hacerlo a mediados del invierno si quieres un cultivo temprano aunque entonces habrá que hacerlo en macetas bajo cristal.
El riego
Recuerda que en el riego está una buena parte del éxito de tu cultivo. ¿Cuándo echarle agua a la planta? El mejor momento es cuando están en floración y fructificación. Al igual que sucede con otras leguminosas, no abuses del agua para evitar que el suelo esté demasiado húmedo, algo que atenta contra su buen crecimiento.
Plagas y enfermedades
A diferencia de otros vegetales, las habas son plantas fuertes, resistentes a muchas plagas y enfermedades. Sin embargo, cultivar habas en casa supone enfrentarse a los siguientes enemigos:
- Pulgón negro: es un insecto que segrega una melaza que altera el desarrollo del cultivo.
- Sitona: es un escarabajo que roe los bordes de las hojas.
- Trips del guisante: una larva que ataca los cultivos de habas y guisantes afectando las vainas.
- Roya: una enfermedad que ataca la parte aérea de la planta (hojas y tallos).
- Mildiu: una enfermedad que provoca manchas en las hojas que luego se desecan.
- Jopo: es una planta parásita que absorbe los nutrientes del cultivo.
La poda
Se recomienda quitar las malas hierbas durante el proceso para que la planta crezca sin alteraciones. Otro buen consejo es pellizcar los brotes par estimular el crecimiento de las vainas.
Ya ves que no es nada complicado cultivar habas en tu huerto en casa, apenas un seguimiento necesario para cuidar a tus plantas en floración.
La cosecha
El cultivo de habas demora entre 70 y 90 días. El mejor momento para la cosecha es cuando las vainas están todavía verdes. A la hora de almacenarlas, es posible hacerlo en congelador.
Un buen consejo a tener en cuenta: recolectar antes de que la piel de las semillas se vuelva áspera.
Cuidados imprescindibles
Siempre es bueno escuchar a los que más saben. En este caso, los expertos nos regalan algunos consejos para lograr habas carnosas y tiernas a la hora de cultivar habas:
– Guía aquéllas variedades de la planta que son más altas con estacas y cuerdas para así controlar su crecimiento.
– Para que la planta madure antes puedes despuntar los extremos de los tallos más importantes una vez que hayan crecido las primeras vainas.
– Al momento de preparar el suelo pueden agregar las semillas que te hayan sobrado para entonces aportar nitrógeno a la tierra.
– Por ser una leguminosa, puede absorber el nitrógeno del aire por lo que no necesita de fertilizantes o estiércol.
– No cultivar junto a otras hortalizas de la familia de las leguminosas.
Plántalo, riégalo, ponlo al Sol y vamos hablando!
Plántalo, riégalo, ponlo al Sol y vamos hablando!